
Cuando algunas infecciones persisten, a pesar de los tratamientos realizados a ciegas o con el único dato de una citología o exploración, es conveniente realizar un cultivo que nos indicará el gérmen responsable, así como su correcto tratamiento. Por otro lado, algunos hallazgos clínicos (hemorragias, tumoraciones, lesiones vulvares...) o ecográficos pueden precisar de una biopsia para su esclarecimiento.